El 18 de septiembre de 2025, Biig Piig aterriza en la Sala Razzmatazz de Barcelona para ofrecer un concierto único que promete ser un viaje emocional a través de sonidos envolventes, letras introspectivas y ritmos que combinan el pop alternativo con el neo-soul, el R&B, la electrónica y el hip hop más delicado. Con una propuesta que rehúye etiquetas cerradas, la artista irlandesa-española se ha consolidado como una de las voces más interesantes de la escena actual, tanto por su sensibilidad como por su estilo inconfundible.
Este concierto forma parte de una nueva gira en la que la artista presenta sus trabajos más recientes, sin dejar de lado los temas que la dieron a conocer. Su música, cantada en inglés y español, es una exploración de lo íntimo, lo cotidiano y lo emocional, todo envuelto en una atmósfera etérea que convierte cada canción en un paisaje mental. La cita en Razzmatazz se anuncia como una de las más esperadas del mes por su capacidad para ofrecer una experiencia que es tanto sensorial como reflexiva.
Una artista entre dos mundos
Biig Piig, nombre artístico de Jess Smyth, nació en Irlanda pero se crió en España y más tarde se trasladó a Londres, una trayectoria vital que ha dejado una profunda huella en su música. Su obra está marcada por una dualidad constante: entre lenguas, géneros, estilos y emociones. Esta mezcla la convierte en una figura única, que transita con soltura entre el underground londinense y el pop alternativo internacional.
Esa identidad híbrida también se traduce en su estética sonora: delicada pero con fuerza, experimental pero accesible, íntima pero sin miedo a hablar claro. Sus canciones hablan de ansiedad, amor, desarraigo, deseo y vulnerabilidad, y lo hacen con una honestidad que conecta con un público amplio, especialmente joven. En sus directos, esa autenticidad se convierte en una de sus principales armas para emocionar y dejar huella.
Un repertorio que abraza lo emocional
El concierto en Razzmatazz incluirá temas de su último álbum, donde Biig Piig continúa su exploración de sonidos ambientales mezclados con beats electrónicos y bases de hip hop. Canciones como Kerosene, This is what they meant o Picking up muestran su evolución hacia una producción más ambiciosa sin perder la intimidad emocional que la caracteriza.
Además de presentar sus nuevos trabajos, no faltarán en el repertorio aquellos temas que marcaron sus primeros pasos, como Vice City, Roses and gold o Perdida. Estas piezas siguen siendo fundamentales para comprender el universo sonoro que ha ido construyendo con coherencia y autenticidad. En conjunto, el concierto será un recorrido por distintas etapas de su carrera, ofreciendo momentos para la introspección y también para el movimiento.
Una puesta en escena minimalista y envolvente
En sus actuaciones, Biig Piig apuesta por una estética cuidada, sobria y efectiva. La escenografía suele ser minimalista, permitiendo que la atención se centre en la música y en la interpretación. Luces suaves, visuales oníricos y una interacción constante con el público hacen que sus conciertos se vivan más como una experiencia sensorial que como un simple espectáculo.
La conexión que establece con quienes la escuchan va más allá de la música. Hay en su manera de estar en escena una mezcla de fragilidad y determinación que atrapa. Cada canción se convierte en una pequeña confesión compartida, y la energía fluye entre escenario y sala de forma natural. En ese espacio, el público no solo escucha: también se reconoce, se recoge, se deja afectar.
Un sonido para bailar desde dentro
Una de las particularidades del estilo de Biig Piig es que invita al movimiento, pero no desde la euforia superficial, sino desde un lugar más profundo. Su música se baila con los ojos cerrados, se siente desde dentro, como si cada beat acompañara un pensamiento, una emoción o un recuerdo. Esto la convierte en una artista difícil de clasificar y, precisamente por eso, especialmente interesante.
El concierto en Razzmatazz será una oportunidad para experimentar ese tipo de conexión: la que nace cuando el cuerpo reacciona a la música, pero también cuando el alma encuentra palabras para sus silencios. Es una propuesta perfecta para quienes buscan algo más que un concierto: una vivencia que mezcle placer estético, emoción honesta y un ritmo que acompaña sin invadir.
Un encuentro generacional
Biig Piig representa una sensibilidad generacional que mezcla el desencanto con la ternura, el ritmo con la pausa, el mensaje con la forma. Su música es hija de la era digital, pero también del deseo de encontrar algo verdadero en medio del ruido. Por eso sus conciertos no son solo citas musicales, sino espacios de encuentro emocional entre quienes comparten ese mismo anhelo de conexión.
El 18 de septiembre en Barcelona, Biig Piig no solo presentará sus canciones: ofrecerá un pedazo de su mundo, hecho de luces tenues, melodías envolventes y palabras que tocan. Para quienes la siguen, será un reencuentro esperado. Para quienes aún no la conocen en directo, una revelación. En ambos casos, la promesa es la misma: salir del concierto con algo nuevo dentro, con la sensación de haber estado, por un rato, en otro lugar.